En la mayoría de los casos, la dentición infantil (dientes de leche) de los niños se caracteriza por presentar espacios entre diente y diente. Si fuese el caso, no sería del todo necesario emplear el hilo dental, ya que el cepillado dental lograría higienizar dichas zonas.
Pero, si vemos que nuestros hijos presentan contacto entre sus dientes, si sería necesario recurrir al hilo dental, por lo menos en aqueññas zonas donde los dientes están íntimamente juntos.
Al respecto, debemos tener siempre presente que los niños no cuentan con la habilidad manual ni con la disciplina para realizar una correcta limpieza bucal. Por ello, es sumamente necesario que los padres se ocupen de dicho asunto y de esta manera, estarían logrando: la progresiva instauración de un correcto hábito en sus hijos (que se acostumbren al uso diario de hilo dental) y a la vez, la enseñanza del cepillado dental y del uso del hilo dental.
Para resumir: si el niño necesita usar el hilo dental, deberían ser los padres los que lo apliquen hasta los 5 - 6 años, edad en la cual los infantes ya podrían realizarlo solos.
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