El hilo dental, también conocido como la seda dental, es un componente crucial en la limpieza bucal inteligente.

Conozca toda la ciencia, ingeniería, historia, diseños, curiosidades, mitos, variaciones y mucho más respecto al hilo o seda dental: el aditamento con el que nos limpiamos entre los dientes.

Para usar el hilo dental correctamente, debemos tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

• Corte unos 30 - 50 centímetros de hilo dental y deje a un lado el empaque
• Sujete el hilo dental cortado con ambas manos, tomando un extremo del hilo dental con la mano derecha y el otro extremo con la mano izquierda
• Tome el hilo dental cortado de tal forma, que quede enrollado sobre sus dedos índices de cada mano y se disponga de un segmento libre de unos 10 centímetros entre ambas manos
• Utilice dicho segmento libre de hilo dental, para limpiar entre sus dientes
• Cuando limpie sus dientes con hilo dental, hágalo en frente de un espejo y con la suficiente luz como para ver lo que hace
• Procure limpiar sus dientes de forma ordenada, sujetando el hilo dental con firmeza pero sin realizar demasiada fuerza
• Sepa que si aplica mucha presión, podría lastimar sus encías
• Empiece por ejemplo con el último diente superior de la derecha y avance progresivamente con el hilo dental diente por diente, ingresando al espacio que existen entre cada una de las piezas dentales
• La idea es limpiar toda la superficie de cada diente e ingresar con suavidad al espacio que existe entre el diente y la encía que lo recubre
• Tenga presente que en cada espacio interdental que ingrese con el hilo dental, deberá limpiar dos superficies (una de cada diente)
• Conforme avanza, vaya desenrollando un poco de hilo dental limpio de uno de sus dedos índice y enrollando el hilo dental utilizado sobre el otro dedo índice
• Una vez que haya limpiado ordenadamente todos sus dientes superiores, realice lo mismo con los dientes inferiores: ingresando con el hilo dental a cada uno de los espacios entre diente y diente
• Si tuviera prótesis dental fija (puentes), sepa que el hilo no "ingresará" entre diente y diente. En estos casos, más bien deberá acceder al espacio que hay entre el puente y los dientes y las encías que lo sostienen.

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