El hilo dental, también conocido como la seda dental, es un componente crucial en la limpieza bucal inteligente.

Conozca toda la ciencia, ingeniería, historia, diseños, curiosidades, mitos, variaciones y mucho más respecto al hilo o seda dental: el aditamento con el que nos limpiamos entre los dientes.

Actualmente, el mercado de productos de higiene bucal es sumamente grande y mueve anualmente varios millones de dólares a nivel mundial. Dentro de él, una porción se vincula con la fabricación, distribución y venta de hilo dental.

La mayoría de hilos dentales disponibles en el mercado son fabricados empleando compuestos sintéticos conocidos como polímeros, usándose principalmente el nylon (nailon) o el teflón.

¿Cómo se fabrica el hilo dental de nylon? La confección de hilo dental de nylon empieza a partir de la preparación del polímero de nylon, que se consigue mezclando una sal con una solución. Dicha mezcla es convertida bajo condiciones de calor en una banda, que luego se fragmenta en pequeñas porciones a través de procesos de mezcla, derretimiento e inyección. Con ello y luego del enfriamiento, se consiguen filamentos que son posteriormente trenzados para dar forma al hilo dental.

¿Cómo se fabrica el hilo dental de teflón? En cambio, el hilo dental de teflón está conformado de un único filamento, que se consigue a partir de la elaboración del polímero de teflón (politetrafluoroetileno), que luego se derrite hasta obtener una pasta que posteriormente es estirada en calor hasta formar una larga y delgada hebra. Esta es estirada y enfriada hasta conseguir el hilo dental de teflón.

Posteriormente, algunos fabricantes de hilo dental le aplican una cobertura al hilo dental obtenido. Dependiendo del caso, el hilo dental se expone a baños de emulsión, sumergiéndolo en la sustancia elegida, que puede ser: cera, saborizante, antibacteriano, fluoruro, etc. Dicho recubrimiento le da al hilo dental diferentes propiedades diferenciales para su posterior comercialización.

El hilo dental conseguido es luego enrrollado en una gran bobina, a partir de la cual se transfiere a un carrete pequeño la porción de hilo dental que se necesita para cada empaque. La cantidad de hilo dental que se incluye en cada empaque varía entre los diferentes fabricantes, existiendo en el mercado paquetes de hilo dental de 25 metros, 50 metros, etc.

Dichos carretes de hilo dental se insertan dentro de cajas confeccionadas comúnmente de plástico, las que pueden estar constituídas por una sola pieza o dos. Estas presentan un aditamento de metal, que sirve para comunicar el interior de la caja con el exterior, presentando además una porción filosa que sirve para que el usuario corte la porción de hilo dental que va a utilizar cada vez.

Dichas cajas son a continuación personalizadas, colocándoles la respectiva etiqueta o imprimiendo sobre ellas los detalles del producto, la marca del fabricante, la longitud de hilo dental que contiene, sus indicaciones de uso, principales beneficios que ofrece, etc.

Y para concluir, antes de su salida de la planta de producción de hilo dental, se termina el proceso insertando cada empaque dentro de un plástico moldeado o eventualmente, combinándolo con otros aditamentos de cuidado oral, como por ejemplo: cepillo dental, crema dental, enjuagatorio, etc.

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